El sector agropecuario enfrenta el desafío de incrementar la producción de alimentos para satisfacer la demanda de la población mundial. En este escenario, el riego y la agricultura familiar (AF) tienen un rol central.
La mayor parte de la AF de América Latina y el Caribe utiliza el riego en base al conocimiento empírico, lo que ocasiona un manejo poco eficiente del agua.
El Sistema de Asesoramiento al Regante (SAR) proporciona a los agricultores información necesaria para mejorar el uso del agua, usando programaciones del riego ajustadas a los requerimientos de los cultivos.
Participan del Proyecto INTA de Argentina, INIA de Uruguay, INTA de Nicaragua, IAS-CSIC de España, la Universidad de Wageningen de los Países Bajos y Kilimo de Argentina.
El proyecto se desarrolla en áreas piloto de Argentina (Nueva Francia y Colonia El Simbolar, Sistema de Riego del Río Dulce, Santiago del Estero); Nicaragua (Municipios de El Sauce, Tisma y Ciudad Darío) y Uruguay (San José y Canelones).
La potencialidad de escalamiento del proyecto permitirá alcanzar, en etapas sucesivas, a 1.550 productores, en un área de influencia de 5.000 hectáreas.
Durante la implementación del Proyecto hubo numerosas reuniones con regantes, sobre la concientización sobre el uso del agua de riego y la adaptación de las nuevas tecnologías a las diversas realidades productivas. Estos intercambios continúan y permiten hacer los ajustes necesarios en el SAR.
El creciente acceso a Internet, telefonía móvil, transmisión de datos a distancia y productos de satélites son oportunidades para mejorar el proceso de extensión y transferencia de tecnologías a los agricultores.
El SAR recomienda al productor cuándo y cuánto regar, mediante un software de balance hídrico que combina las tecnologías mencionadas con mediciones de humedad del suelo.